Las Profecías Mesiánicas se cumplen en Jesús

El Cumplimiento Mesiánico en Jesús


El cumplimiento de las profecías mesiánicas es uno de los pilares fundamentales de la teología cristiana. A lo largo del Antiguo Testamento, Dios revela su plan de redención a través de la promesa de un Mesías. Estas profecías, muchas de ellas con miles de años de antigüedad, encuentran su cumplimiento en la persona de Jesús de Nazaret. Este estudio bíblico explora cómo Jesús cumple estas profecías de manera única, confirmando su identidad como el Mesías prometido.

1. La promesa de un Salvador: Génesis 3:15

• Texto: “Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; esta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.”
• Contexto: Este versículo es conocido como el “Protoevangelio”, o la primera mención del evangelio. Es decir, la primera promesa de un Salvador. Después de la caída del hombre en el pecado, Dios promete un Redentor que aplastará a la serpiente (Satanás). La “simiente de la mujer” es vista como una profecía del Mesías. Esta es la primera ceremonia mediante la cual se sacrifica un animal (posiblemente un cordero) para sacar pieles y cubrir la desnudez de Adán y Eva.
• Cumplimiento en Jesús: En la cruz, Jesús sufrió (herida en el calcañar), pero al resucitar, derrotó el poder del pecado y de Satanás (herida en la cabeza). Romanos 16:20 alude a esta victoria.
“Y el Dios de paz aplastará en breve a Satanás bajo vuestros pies. La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros.” (NRV 1960)

2. Un Mesías de la descendencia de Abraham: Génesis 12:3

• Texto: “Y serán benditas en ti todas las familias de la tierra.”
• Contexto: Dios promete a Abraham que a través de su descendencia, todas las naciones serían bendecidas.
• Cumplimiento en Jesús: Según Mateo 1:1, Jesús es descendiente de Abraham. A través de su obra redentora, las bendiciones de Dios se extienden a todas las naciones, cumpliendo la promesa a Abraham (Gálatas 3:16).
“Ahora bien, a Abraham fueron hechas las promesas, y a su simiente. No dice: Y a las simientes, como si hablase de muchos, sino como de uno: Y a tu simiente, la cual es Cristo.”

3. El linaje de David: 2 Samuel 7:12-13

• Texto: “Cuando tus días sean cumplidos y duermas con tus padres, yo levantaré después de ti a uno de tu linaje, el cual procederá de tus entrañas, y afirmaré su reino. Él edificará casa a mi nombre, y yo afirmaré para siempre el trono de su reino.”
• Contexto: Dios le promete a David que su descendencia perpetuará el trono para siempre, señalando al Mesías como Rey eterno. Este es uno de los pasajes calificados como mesiánicos, trata de mostrar en época del Rey David la esperanza de un mesías rey eterno. “
• Cumplimiento en Jesús: Jesús es llamado “Hijo de David” en el Nuevo Testamento (Mateo 1:1). Su reino no es terrenal sino eterno, y Él es reconocido como el Rey de reyes (Lucas 1:32-33).
“Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; 33 y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.”

4. Nacimiento virginal: Isaías 7:14

• Texto: “Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel.”
• Contexto: Isaías profetiza el nacimiento milagroso del Mesías.
• Cumplimiento en Jesús: Según Mateo 1:22-23, Jesús nace de la virgen María, cumpliendo esta profecía. El nombre “Emanuel” significa “Dios con nosotros”, enfatizando la encarnación de Dios en Jesús.

5. Nacido en Belén: Miqueas 5:2

• Texto: “Pero tú, Belén Efrata, pequeña para estar entre las familias de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel; y sus salidas son desde el principio, desde los días de la eternidad.”
• Contexto: Miqueas profetiza que el Mesías nacería en la pequeña ciudad de Belén.
• Cumplimiento en Jesús: En Mateo 2:1, se registra que Jesús nació en Belén, cumpliendo la profecía exacta. Además, el versículo menciona la eternidad del Mesías, lo que coincide con la naturaleza eterna de Cristo (Juan 1:1).

6. Ministerio de milagros: Isaías 61:1-2

• Texto: “El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel…”
• Contexto: Isaías profetiza que el Mesías vendría a liberar, sanar y proclamar las buenas nuevas.
• Cumplimiento en Jesús: En Lucas 4:16-21, Jesús se levanta en la sinagoga y lee esta profecía, declarando que se cumple en Él mismo. Su ministerio estuvo marcado por la predicación, los milagros y la liberación espiritual.

7. El Siervo Sufriente: Isaías 53

• Texto: “Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto… Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores… Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados…”
• Contexto: Este pasaje describe al Mesías como un siervo que sufriría y moriría por los pecados de su pueblo.
• Cumplimiento en Jesús: Isaías 53 encuentra su realización en la crucifixión de Jesús. Él fue despreciado, azotado y crucificado, llevando sobre sí los pecados de la humanidad (1 Pedro 2:24, Juan 19).

8. Resurrección del Mesías: Salmo 16:10

• Texto: “Porque no dejarás mi alma en el Seol, ni permitirás que tu santo vea corrupción.”
• Contexto: El salmista profetiza que el Mesías no experimentará la descomposición, señalando a la resurrección.
• Cumplimiento en Jesús: En Hechos 2:24-31, Pedro cita este salmo y afirma que se refiere a la resurrección de Cristo, quien venció a la muerte y no permaneció en el sepulcro.

9. El inicio de la última obra sumosacerdotal de Cristo en el santuario celestial y El regreso triunfal: Daniel 7:13-14

• Texto: “Miraba yo en la visión de la noche, y he aquí con las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre, que vino hasta el Anciano de días, y le hicieron acercarse delante de él. Y le fue dado dominio, gloria y reino, para que todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio es dominio eterno, que nunca pasará…”
• Contexto: Daniel profetiza la venida del Mesías como el “Hijo del Hombre”, y aunque este pasaje en particular habla sobre el inicio del último oficio sacerdotal de Cristo en el santuario celestial, es claro que describe a la persona de Cristo en conexión con su segunda venida.
• Cumplimiento en Jesús: Jesús se refiere a sí mismo como el “Hijo del Hombre” repetidamente (Mateo 26:64), y todo creyente espera su segunda venida en gloria, para llevar a sus redimidos l cielo al reino milenial.

Conclusión

A través de este estudio, hemos visto cómo las profecías del Antiguo Testamento apuntan claramente hacia Jesús como el Mesías prometido. Él cumplió cada una de estas promesas de manera precisa, confirmando que es el Salvador del mundo. La obra redentora de Jesús, desde su nacimiento hasta su resurrección y su inminente venida, refleja el plan de Dios para la humanidad. Jesús no solo cumple las expectativas mesiánicas, sino que supera cualquier comprensión humana de lo que significa ser el Redentor prometido.
El libro La educación en la página 103 dice:
“Cristo es el cumplimiento de todas las promesas hechas a los padres. En él se encuentra el cumplimiento de las profecías. Todas las cosas, desde el principio, han apuntado a él; los sacrificios, las ofrendas, las ceremonias y los símbolos de la antigua dispensación eran representaciones de él.”
Que Dios les bendiga!

José M Suazo -MDiv
Escritor y Profesor de Teología